Visitas que entristecen

Trabajo en una gran empresa donde existe una gran mayoría de mujeres, esto significa que casi en cada luna llena se produce un embarazo de una de mis compañeras. Si los tratamientos de fertilidad son duros por naturaleza, también lo es encontrarte día si y día también a una persona embarazada en los pasillos de tu oficina, en los despachos, cuando bajas a desayunar, cuando entras por la mañana o cuando sales al mediodía, y estas situaciones se producen más de lo que yo desearía.

Hace ahora un parto y unos meses, una compañera de trabajo dio a luz a una niña, y como viene siendo de costumbre se produce la rigurosa visita de la mamá y el bebé a mi trabajo. Esta mañana al subir de desayunar me dirigía a mi despacho, cuando de golpe oí mucha algarabía, y un grupo de mujeres rodeando a algo que parecía un carro con un bebé.Lo lógico habría sido acercarme a saludar o a hacer carantoñas al bebé, pero algo en mí me lo impedía, no me apetecía vivir nuevamente esa escena, me recuerda a lo que quiero y no puedo tener, así que he puesto pies en polvorosa y he intentado huir de forma sigilosa a mi despacho. Una vez en él, me ha invadido la tristeza, he sentido nuevamente ese vacío que sólo conocen las personas que desgraciadamente viven esta experiencia, y vuelves a preguntarte ¿porqué para algunas es tan fácil?¿porqué algo que debería estar al alcance de todos es tan difícil para algunos? en fin que de nuevo una nebulosa se ha acoplado en mi cabeza para atormentarme con esas preguntas que no tienen respuesta.

Otro de los motivos por los que no me he acercado, es porqué temía que me hicieran la dichosa pregunta del ¿Y tú para cuándo?, y realmente es una pregunta que me han hecho mil veces y de la que ya debería tener ensayadísima la respuesta, pero cada vez que me la hacen, es como si fuese la primera vez, y ciertamente no sé que contestar, entro casi en un estado de pánico, casi no me sale palabra, me incomoda tanto esta pregunta que intento evitarla al máximo. No sé si es debido a que estoy inmersa en el tema de la infertilidad, pero creo que esa pregunta no se me ocurriría hacerla jamás, quizás porqué soy consciente de que como yo, mucha gente vive esta situación, y probablemente las personas que han sido madres de forma natural, no saben que existen muchas mujeres que están pasando por esta situación, y esto les hace ser menos empáticas.

En fin, que la dichosa infertilidad hace que constantemente tengas que evitar situaciones que sabes que van a ser dolorosas, ¿y porqué no evitarte pasar malos tragos?, ¿porqué no protegerte de algo que sabes que te va a tener toda una mañana triste?, creo que es totalmente lícito. El otro día le comentamos a la psicóloga que en cierto modo nos habíamos alejado de parejas que tienen o van a tener hijos, porqué esta situación nos produce a mi costilla y a mi cierta tristeza, y las palabras de ella fueron estas : «Debéis volver a hacer actividades con estas amistades, porqué cuando te quedes embarazada, que será pronto, necesitarás consejos de tus amigas, querrás amiguitos para tus hijos etc…», y obviamente tiene razón, pero de momento es cierto que intento evitar ciertas situaciones que me entristecen, más adelante estaré preparada.

«Sólo me pongo triste cuando alguno…en el momento más inoportuno… me pregunta por ti. (Joaquín Sabina)»

6 comentarios sobre “Visitas que entristecen

  1. Hola! siento mucho que tengas que vivir esas situaciones y mas que estén constantemente con la pregunta de «y tú para cuando? , yo lo que hacía era contestar muy cortante diciendo que no podía tener hijos, y asi les dejaba ya callados y no me preguntaban mas o a algunas personas le decía que estaba en tratamiento de fertilidad pero que aun asi no podía tener hijos, aunque solo a las personas que tenía confianza porque enseguida te intentan animar y te dicen» bueno, tu relajaté que ya vendrá» y entonces te da mas rabia. Pero diciendo un «no puedo tener hijos» y cambias de tema… no solían decir nada mas.

    En cuanto a tu psicologa, no sé si es tan bueno eso de relacionarte con otros amigos con hijos… solo cuando te sientas preparada pero es mejor no forzarte ni nada porque es peor…
    Nosotros nos alejamos mucho de toda esa persona que tuviera hijos, y si te quieren de verdad lo entenderán, si no pues nada… ahora que he conseguido el embarazo tengo su apoyo igualmente y me han desmostrado que son amigos de verdad.

    Un besito!

    Me gusta

    1. Hola Meri!muchas gracias por tus comentarios. Creo que solo las que pasamos por este calvario podemos entender lo duros y dolorosos que pueden resultar esos comentarios. Recuerdo mi ingenuidad al principio, cuando expliqué a mis más allegados que empezábamos el tratamiento, hoy por hoy, ya no cuento nada, porqué no quiero recibir consejos, no los necesito, puesto que nunca acaban siendo comentarios constructivos o que te ayuden a sentirte mejor, quizás todo lo contrario. En cuanto a lo de mi psicóloga, obviamente no me siento preparada para compartir de forma activa mi vida con otras parejas con niños, es mi decisión y nada de lo que me digan puede convencerme de lo contrario, aun no, no me siento preparada, sé que cuando llegue mi embarazo desaparecerán muchos de mis miedos y de mis inseguridades, pero ahora no es el momento, así que en este aspecto no voy a dar mi brazo a torcer. Gracias por todo guapa!! Un beso y cuídate mucho.

      Me gusta

  2. Se que puede que no sea consuelo pero a mi me ayudó muchísimo contarlo en mi círculo de amistades. Enseguida dejaron de hacer «la pregunta» y se portaron fenomenal :). Yo se que puede ser difícil dar el paso pero una vez lo das, se te quita un peso enorme de encima y si ya eres capaz de contar a tu alrededor con personas empáticas, lo van a entender y te van a hacer más sencilla la situación.

    Un abrazo 🙂

    Me gusta

    1. Hola Hobbita!Muchas gracias por tu apoyo. Lo cierto es que cuando el camino se hace tan sumamente largo, decides compartir cada vez menos tus vivencias y te vuelves un poco más reservada en ese tema. Me considero una persona afortunada porqué se que cuento con algunas personas, entre las que están mis hermanas a las que adoro, con las que sé que si en algún momento necesito su ayuda van a estar ahí, y que en ningún momento van a juzgar ninguna de las decisiones que tome. Muchas gracias de nuevo. Un beso!

      Me gusta

    1. Hola guapa!! me alegra mucho que te hayas decidido a hacer tu comentario. Siento que la entrada no haya sido más alegre. Soy consciente de que cada una de las palabras expresan mucho dolor y sufrimiento, y que pueden remover muchas cosas, pero desafortunadamente son cosas que pasan, y creo que es bueno compartirlo con otras personas.
      Siento también que hayas tenido que vivir dos pérdidas, opino como tú en ese sentido, se pasa tan sumamente mal que no desearías que nadie más tuviera que pasar por esa misma situación, es increíble que a veces tengas que pasar tantas pruebas para conseguir algo que ansías tanto.
      Creo que al final todo esto nos demuestra que somos capaces de lidiar con cualquier cosa, luchar contra viento y marea por conseguir nuestro sueño de ser madre, y a pesar de haber vivido experiencias tan dramáticas como las nuestras, aún estamos aquí, confiando en que el milagro suceda algún día no muy lejano.
      En cuanto a lo de los comentarios, sé que muchas veces son difíciles de encajar, pero aunque no nos guste tenemos que educar a los demás, es decir cuando recibamos un comentario desagradable tenemos que sacar a relucir esa fuerza que nos caracteriza y decir “ese comentario no me ha gustado”,(yo estoy en el camino de lograrlo, aunque cuesta ser asertiva), y sobretodo rodearte de gente empática, que te entienda, que no te juzgue y que te dé cariño en esos momentos tan difíciles. También es cierto que muchas veces la gente de nuestro alrededor no es consciente de lo mal que lo estamos pasando y en vez de ayudar hacen más daño con sus comentarios “bienintencionados”.

      Muchas gracias por compartir tu experiencia conmigo.

      Besos!!

      Me gusta

Deja un comentario